La naturaleza es sabia, y sabe cuando debe polinizar y dar frutos, pero si polinizamos manual los calabacines aseguramos la cosecha. 😛
Hace unos años tuvimos muchos problemas con las calabaceras, porque los frutos no llegaban a término, se empezaban a arrugar antes. Los periódicos decían que si había problemas porque había menos abejas, y entonces no se polinizaban los frutos (no hablaban de mis calabaceras, sino en general).
 Primero localizaremos las dos flores que vamos a utilizar. Una macho y la otra hembra.
Una sólo tendrá el tallo largo y en la punta la flor:
Y la otra tendrá la forma del calabacín en pequeño, y en la punta la flor:
Cogeremos la primera flor,la del tallo largo, y la abriremos con mucho cuidado con los dedos sin romperla. Veremos que dentro aparece una bolita amarilla que desprende polvillo del mismo color. Esto será lo que polinice la otra flor.
Muchas veces al coger la flor, ella misma se suelta del tallo. La podéis quitar vosotros, que se os caiga, o coger la bolita amarilla sin quitar la flor. Cualquiera de las tres formar vale.
Una vez tengamos la bolita amarilla, procederemos con mucho cuidado a introducirla dentro de la flor que tiene en la punta el mini calabacín. Y ojo!, esta si que hay que tener cuidado de no arrancarla,porque sino no salvaremos el calabacín.
Una vez dentro, cerraremos la flor cuidadosamente con los dedos, y aquí no ha pasado nada, a esperar que crezca el calabacín 😉
20-5-12
El calabacín polinizado a día de hoy.